lunes, 17 de mayo de 2010

EN TEORÍA


El concepto de After Work, si lo pensamos bien, no es algo nuevo. Siempre ha existido, sobre todo en España donde existe un número elevadísimo de bares y toda una cultura entorno a ellos. Según el Anuario Económico de España 2009 de La Caixa, en nuestro país hay un bar por cada 461 habitantes, así que no es de extrañar que, en el trayecto del trabajo a casa, alguno se interponga en nuestro camino, junto a compañeros de la oficina, para compartir unas risas antes del día siguiente.

Lo que ha cambiado es el nombre. Es el nombre y son los matices. Ahora After Work no es tomarse algo tras terminar la jornada laboral, sino que encierra acepciones como relax, evasión, liberación de tensión unida a un buen ambiente y a un querer saborear ese tiempo que es nuestro.

Es un paso más allá, quizá circunstancial como respuesta a la esclavitud del reloj en el Tiempo en el que vivimos y el alargarse de las horas frente al ordenador.

Ya en otros países este concepto, con todas sus acepciones, está más que implantado, existiendo grupos que organizan encuentros o comunidades que se reunen en una determinada zona.

En España, más o menos consolidado, existe, así que, ¿por qué no hacerlo hoy, que es lunes?

4 comentarios:

  1. La verdad es que si que uno tiene que ralajarse despues de trabaja, que mejor que un cervenzon con tus compañeros, deberia de ser una regla obligatoria de todas las compañias.

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  2. lunes, martes o viernes... qué importa el día si el tiempo se disfruta y, sobre todo, se comparte en buena compañía...todos deberíamos adoptar esa filosofía de disfrutar del afterworker, puesto que así todos estaríamos más motivados a la hora de ir a trabajar, incluso!!! No hay nada como un buen ambiente de trabajo y poder, asimismo, prolongar las relaciones sociales afterwork!!! con la gente del mismo entorno laboral y con otras... creo que todo es perfectamente compaginable... y viviríamos más felices...

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  3. Yo viví en Luxemburgo hace tiempo, ahí estaba muy de moda lo del afterwork. La verdad es que se agradecía en invierno, bueno, ahí siempre es un poco invierno jaja. Salíamos del curro y nos íbamos al centro, había como tres bares o cuatro que organizaban afterwork pero diferentes días de la semana, así que teníamos nuestra ruta establecida. Bebíamos una cerve o un vino si es que teníamos el día fino y ya puestos con el aperitivo cenábamos. El único problema es que se te vaya de las manos jeje, si eres joven y no tienes familia puedes llegar a casa muuuy tarde y al trabajo con ojeras pero, ¿y la de anécdotas que puedes contar al día siguiente?
    :-)

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  4. Y hoy ya es jueves y queda menos para el fin de semana...
    Yo viví en Italia y ahí también se estilaba mucho. Yo era estudiante, pero cuando iba después de la universidad a tomar el aperitivo (que consistía en una cerveza o un buen vino piamontés y buffet libre), veía a muchísimos hombres con chaqueta y corbata y mujeres que se veía que volvían del trabajo..está muy bien pensado, la posibilidad de tener un momento para tí y desconectar de verdad (porque no creo que valga para nada si te llevas toda tu agenda laboral en la cabeza..)

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Cuando la oficina queda lejos. Justo a la vuelta de la esquina del día siguiente...